La lesión de una entesis (punto donde se inserta tendón y ligamento en el hueso) o el proceso inflamatorio de la entesis, el síntoma más frecuente: dolor, inflamación y enrojecimiento en el punto doloroso. Generalmente se diagnostica como una tendinitis ya que presenta los mismos síntomas pero con el dolor más localizado o referido (sintiéndose a lo largo del hueso). La causa principal de la entesitis es el traumatismo o el sobreesfuerzo al realizar movimiento repetitivo o sufrir una caída: afecta generalmente a la persona mayor de 40 años y a aquel que practica deporte de contacto o de riesgo. Al igual que en la tendinitis, la entesitis puede cronificarse acumulando calcio y formando hueso nuevo donde antes había tendón: en esté caso aparece pequeño pico de hueso que sobresale. El tratamiento de la entesitis es similar a la tendinitis: reposo, antiinflamatorio, infiltración y rehabilitación, cuando la lesión no mejora se puede optar por la cirugía.