Clase de plantas inferiores, considerada modernamente como un apéndice de los hongos. Sus representantes se hallan constituidos por la asociación simbiótica de hongos ascomicetes y basidiomicetes (éstos en muy corto número) con algas clorofíceas o con esquizófitos (grupo cianofíceas), así como también protococáceas y pleurococáceas. Esta unión es unas veces parasitaria por parte del hongo y otras tiene carácter de consorcio simbiótico, si bien este extremo queda dudoso, como consecuencia de las investigaciones más recientes. El talo formado a expensas de esta asociación es en raros casos homómero, y entonces de consistencia cartilaginosa o gelatinosa, ostentando una estructura irregular de sus elementos fúngico y algino; por el contrario, la mayoría de las veces se presenta heterómero, con disposición del alga (gonidio) en un estrato central, situado entre las capas cortical y medular. El talo se desarrolla a veces bajo la corteza de los árboles (hipofleódico); en ocasiones se muestra endolítico, destruyendo las rocas sobre que vive; otras veces aparece crustáceo, foliáceo, arbustiforme, etc. Las algas contenidas en el talo (gonidio) se multiplican sólo por vía vegetativa, pero fuera de él, también mediante zoóspora natátil. Un modo muy general de multiplicación liquénico es mediante soredios, grupitos de gonidios envueltos por filamentos fúngicos; raramente mediante gonidios himeniales, unidos a las ascósporas. Las esporas se forman en ascos, en la mayoría de los líquenes (ascolíquenes), y los ascos, a su vez, se hallan agrupados en apotecios. Estas ascósporas se hallan en número de 1 a 16, en los ascos, y pueden ser unicelulares o tabicadas. Muy raramente se hallan basidióspora (basidiolíquenes). De estos seres se obtienen ciertos productos especiales, como son la resorcina, el ácido liquénico, esencias aromática, etc. Algunas especies se utilizan en la alimentación humana: así el maná (Lecanora esculenta), que vive desde Crimea hasta la estepa de los Kirguises y en el norte del Sáhara. La Gyrophora esculenta (iwatake de los japoneses), frecuentemente consumida en el Japón. Las regiones árticas y subártica están pobladas por el hombre gracias a la Cladonia rangiferina, liquen de los renos, que es la base de la alimentación de estos animales y también del hombre circumpolar. Comprende las subclases de los ascolíquenes y basidiolíquenes.