Acción y efecto de adaptar o adaptarse. En biología, proceso que hace acto a un órgano o, más frecuentemente, a un organismo para resistir la condición del medio en que se halla y acomodarse a ella (adaptación biológica). Adaptarse, ha dicho Le Dantec, es habituarse. La falta de adaptación puede provocar el desmedro del organismo o su muerte, y aun la desaparición de la especia. La adaptación se opone a la herencia, en cuanto afecta al individuo. En la teoría de la evolución, término que, indica que un animal o una planta modifica su característica física, alimenticia o de cualquier otro tipo, para aumentar su posibilidad de sobrevivir. La selección natural de la adaptación heredada lleva al desarrollo de nueva especie. La sucesiva adaptación de una especie a un medio ambiente particular limita la capacidad de adaptarse a cambio brusco del medio ambiente en general. En fisiología, se aplica a la modificación de la sensibilidad (su aumento o su disminución) de un órgano sensorial a captar sensación más extrema de la habitual (adaptación sensorial); por ejemplo la capacidad de ajustar la visión a condición muy oscura o muy luminosa. En sociología, se aplica a la manera en que cualquier sistema social responde al entorno con el fin de sobrevivir (adaptación social).