La profesión y titulación de la persona que se dedica al cuidado y atención de enfermos y heridos, así como a otras tareas sanitarias, siguiendo pautas clínicas; el conjunto de estudios requeridos para conseguir esta titulación.
La práctica en al cual el profesional de enfermería ayuda «al individuo, enfermo o sano, a la realización de aquellas actividades que contribuyan a la salud o a su recuperación (o a una muerte pacífica), asumiendo que el paciente realizaría dichas actividades si dispusiera de la fuerza, voluntad o conocimientos necesarios; se debe realizar lo expuesto de forma que se favorezca la autonomía progresiva del paciente tan rápido como sea posible» (Virginia Henderson); el proceso de actuación del profesional de enfermería, de proporcionar los cuidados que favorecen y promocionan la salud de la persona o personas atendidas; la práctica profesional del personal cualificado de enfermería.
El diagnóstico y tratamiento de las respuestas humanas ante problemas de salud reales o potenciales (American Nurses’ Association); hay cuatro características principales para definir la atención de enfermería: los fenómenos que implican al personal; la utilización de teorías para observar la necesidad de la intervención y planificar al actuación de enfermería; la acción que se tome y los efectos de la actuación sobre el fenómeno.
Esta definición aporta una estructura para el proceso de enfermería, que incluye la obtención de datos, el diagnóstico, la planificación, el tratamiento y la evaluación. El diagnóstico de enfermería deriva de la obtención de información sobre la salud del paciente. El plan de los cuidados de enfermería incorporan los objetivos derivados del diagnóstico de enfermería y las prioridades y abordajes para conseguir los objetivos indicados en el diagnóstico de enfermería. Las acciones de enfermería, que se seleccionan y realizan con la participación del paciente, se dirigen a fomentar, mantener o restaurar la salud del paciente, y sirven para maximizar las capacidades del cuidado de la salud del paciente. El paciente y el personal de enfermería evalúan juntos el progreso o la ausencia de progreso hacia los objetivos, lo que da lugar a la reevaluación la reordenación de las prioridades, el establecimiento de nuevos objetivos y la revisión del plan de los cuidados de enfermería.