Se aplica al embrión de los rudimentos seminales campilótropos, porque, siguiendo la curvatura de éstos, se encorva también, en arco, por sus dos extremos, es decir, por la radícula y los cotilédones, como ocurre en el guisante; es término debido a Richard. Para Mirbel, se aplica a los rudimentos seminales campilótropos en que la cálaza no se halla muy distante del hilo y existe una breve rafe. Ver antitropo y homótropo.