La forma de dolor precordial que a veces precede al infarto agudo de miocardio. Tiene un comienzo brusco, empeora repentinamente y suele recurrir de forma intermitente durante días o semanas. Posee un pronóstico pero a corto plazo que la angina estable de esfuerzo. Aproximadamente un tercio de los paciente con angina inestable sufren un infarto de miocardio en los tres meses siguientes.