Es un reflujo anómalo de orina desde la vejiga al uréter a causa de un defecto congénito, obstrucción del orificio de salida vesical o edema y cicatrización secundaria e infección de las vías urinarias inferiores. El reflujo incrementa la presión hidrostática en los uréteres y los riñones y puede causar un daño permanente. El trastorno se caracteriza por dolor abdominal o en el costado, enuresis, piuria, hematuria, proteinuria y bacteriuria, y se acompaña de infecciones persistentes o recurrentes de las vías urinarias.