La altura de un punto. En geografía, es la distancia vertical que separa un punto respecto de otro que le sirve de referencia, generalmente el nivel del mar; el Teide tiene 3 718 m de altitud. En medicina, la altitud media o altura media está entre 1.829 y 3.048 m por encima del nivel del mar; la altura elevada supera los 3.048 m por encima del nivel del mar. A medida que aumenta la altitud, la presión barométrica decrece y se reduce la presión parcial de oxígeno, lo cual reduce el consumo máximo de oxígeno: además, la temperatura desciende con ritmo de 1 ºC por cada 150 m. El consumo máximo de oxígeno decrece a medida que aumenta la altitud por encima de los 1.600 m; por consiguiente, la altitud media y altitud elevada puede influir negativamente en actividad de resistencia física, sobre todo en la persona que vive al nivel del mar. La capacidad de rendimiento anaeróbico a corto plazo no resulta afectada negativamente por la altitud media. Al contrario, la atmósfera enrarecida puede ser beneficiosa para el velocista, lanzador y saltador (aclimatación a la altitud y entrenamiento en altitud).