La medicación esteroidea oral para la anticoncepción (ACO). La dos hormonas sexuales principales de las mujeres son los estrógenos y las progestinas. Cuando se administran las formas sintéticas de estas hormonas inhiben la producción de la hormona liberadora de gonadotropina por el hipotálamo, con lo que la hipófisis no segrega gonadotropinas que estimulen la maduración folicular y la ovulación. Por lo general, los anticonceptivos orales que sólo contienen progestinas no impiden la ovulación, sino que mantienen el moco cervical espeso, evitando la penetración del esperma en el útero y las trompas de Falopio; si se utilizan correctamente la tasa de embarazos es inferior al 0,2% al año.