La fuerza de arrastre que actúa en la misma dirección que el movimiento de un cuerpo por un fluido; por ejemplo, un viento de cola cuya velocidad es superior a la de un cuerpo en movimiento contribuye a la propulsión de ese cuerpo. El arrastre de propulsión contribuye a generar el movimiento del nadador, sobre todo el que nada estilo crol. El movimiento hacia atrás de manos y brazos por el agua genera fuerza de reacción dirigida hacia delante que impulsa al nadador hacia delante.