El término es atribuido a los cromosomas no sexuales. En biología, el cromosoma apareado no responsable de la determinación del sexo; la especie humana posee 22 pares de autosomas y un par de cromosomas sexuales. En botánica, se aplica a cualquiera de los cromosomas distintos de los heterocromosomas (véase determinación del sexo) (J. H. y S.). En genética, todo cromosoma que no es un cromosoma sexual y que aparece en las células somáticas como par homólogo; los seres humanos poseen 22 pares de autosomas, que participan en la transmisión de todos los rasgos y circunstancias genéticas, excepto las ligadas al sexo.