Se aplica, en EE.UU., al profesional sanitario que ayuda al oftalmólogo recogiendo datos y administrando el tratamiento prescrito por él. Estos profesionales están cualificados para elaborar las historias clínicas de los pacientes, aplicar pruebas diagnósticas, tomar medidas anatómicas y funcionales del ojo, explorar las funciones oculares, incluida la agudeza visual, los campos visuales y las funciones sensitivomotoras, administrar medicación ocular tópica e instruir al paciente sobre el cuidado domiciliario y utilización de lentes de contactos.