Considerada la hoja en su totalidad, es decir, contituída por el pecíolo y la lámina, corresponde a la base del pecíolo, generalmente un poco ensanchada y a menudo desarrollada de manera singular. Tiene importancia en este último caso porque sirve de protección al primordio de la hoja inmediata superior en el tallo o rama. En otros casos se forman en ella estípulas o se transforma en la llamada vaina. Considerada antiguamente la hoja como reducida a la lámina, la base era entonces la parte inferior de ésa.