Bomba, generalmente de fisión, cuyo poder destructivo se debe a la liberación de neutrones de elevada energía. Los efectos térmicos y mecánicos de la explosión son despreciables frente a la radiación creada, causante de daños incalculables en los organismos vivos. Puede ser de dos tipos, según se base en la fisión o la fusión nuclear: la bomba de fisión está constituida por dos masas subcríticas (fisión), que al unirse dan lugar a una masa supercrítica y explotan. En la bomba de fusión o de hidrógeno para desencadenar la fusión se usa una bomba de fisión como detonante. La energía desprendida es mucho mayor que en las de fisión y el peligro de una lluvia radiactiva es mucho menor.