La conducción retrógrada del impulso nervioso a partir de un receptor situado en la zona media de un axón. Se trata de un fenómeno anómalo y puede ser provocado de forma experimental. Dado que las conexiones sinápticas sólo permiten la conducción en una dirección, los impulsos antidrómicos retrógrados no consiguen atravesar la sinapsis y desaparecen en este punto.