El paroxismo en el que los ojos se colocan en una posición fija, normalmente hacia arriba y hacia un lado, durante minutos u horas, apareciendo a menudo en el paciente postencefalítico con signos de parkinsonismo. El estrés emocional y la sobredosis de neurolépticos pueden precipitar crisis oculógiras, y los pacientes con este trastorno presentan síntomas psiquiátricos con frecuencias.