La lesión producto de una flexión forzada y repentina de la articulación terminal del dedo. Se produces el desprendimiento del tendón de la inserción ósea, lo cual deja al paciente incapaz de extender el dedo afectado. La inserción del tendón en el hueso es tan fuerte que el mismo hueso puede resultar dañado y desprenderse en fragmento óseo junto con el tendón (fractura por arrancamiento). El dedo en martillo es muy corriente el el juego de pelota cuando se cierra un poco la mano antes de coger la pelota. La pelota golpea el extremo de un dedo y lo fuerza a adoptar una flexión que desgarra el tendón. Si no se trata o se trata de manera inadecuada, el dedo se puede deformar permanentemente, y una fractura por arrancamiento grave puede derivar en artritis en el futuro. El autotratamiento inmediato consiste en inmovilización del dedo y aplicación de hielo (tratamiento con hielo). El tratamiento posterior a cargo de un médico depende de la gravedad de la lesión. En el adulto, la lesión leve tal vez no necesite un tratamiento especial, aunque la mayoría de los casos el dedo en martillo requiere inmovilización permanente con el dedo extendido dentro de una férula de plástico durante 6-8 semanas; la fractura por arrancamiento grave a veces requiere reducción quirúrgica y fijación quirúrgica.