Tratándose de plantas dioicas, dícese que existe dimorfismo sexual cuando el individuo femenino y el masculino tienen distinta morfología. En los hongos está reducido al mínimo, conociéndose las formas heterotálicas, en las que los talos de sexo distinto sólo se diferencian desde un punto de vista fisiológico, por lo que se ha convenido en diferenciarlos con los signos + y -. Raramente hay una diferenciación morfológica (E. G.).