La condición de las especies animales o vegetales que presentan dos formas o dos aspectos anatómicos diferentes; fenómeno en que se dan dos formas distintas en su morfología externa en una determinada especie. En botánica, fenómeno relativo a las plantas o a los órganos dimorfos: dícese especialmente de la heterodistilia. Existe también dimorfismo, en general, entre el gametófito y el esporófito de la misma especie vegetal, muy pronunciado en los musgos y helechos. En los antófitos este tipo de dimorfismo, como consecuencia de la reducción del gametófito y de su desarrollo en el seno del esporófito, ha llegado a afectar a éste. El dimorfismo del esporófito de los antófitos es un dimorfismo sexual, que se manifiesta en porciones más o menos extensas de la planta, desde los órganos sexuales hasta la totalidad de las flores, si son unisexuales, o de las inflorescencias, etc. Asimismo existe dimorfismo en las plantas que, como las uredíneas, dan dos clases de esporas en un mismo soro. En geología, la condición de una sustancia que puede cristalizar en dos sistemas diferentes; por ejemplo, el carbonato cálcico, que se presenta como aragonito y espato calizo. En cristalografía, la propiedad de algunos cuerpos de cristalizar en dos sistemas diferentes.