En botánica, dícese del vástago o del árbol, en que ocurre el fenómeno de la filobolia durante la primavera, limitada, sin embargo, a sólo parte de las hojas, a saber, las situadas en la base de los brotes, más pequeñas que las demás y de muy menguado rendimiento desde el punto de vista de la fotosíntesis. Esas hojas, que empiezan amarilleando cuando las demás están en pleno desarrollo, a menudo no formadas por completo, suelen caerse de golpe. Ver erofilóbolo.