Sobreentendiéndose la especificación de vegetal, la voz ecología se ha empleado en tres acepciones distintas: 1) el estudio de los factores cuya suma compone la estación: esta acepción fué propuesta por Jaccard en el Congr. Intern. de Botánica en Bruselas 1910; 2) el estudio de las relaciones entre la vida vegetal y el medio estacional: este sentido fué el aceptado por la Ponencia de dicho Congreso, que dividió la ecología, así entendida, en autoecología y sinecología; 3) como sinónimo de geobotánica: este tercer sentido, aunque el menos propio, sigue en vigor en los países de lengua inglesa (ecology).
Según la acepción 2), la ecología estudia el organismo en relación con el medio en que se desenvuelve, y trata de desentrañar cómo éste puede influir en aquél. La ecología vegetal se concreta al estudio de esa influencia mesológica, tanto del mundo inorgánico como organizado, sobre la planta. Así como la fisiología, propiamente dicha, investiga la causa de los fenómenos vitales, la ecología trata de precisar los efectos que las influencias mesológicas pueden determinar sobre los organismos vegetales. En la ecología, como resulta de su mismo significado etimológico, lo trascendente es la morada, el medio, como determinante del proceso orgánico muy diversos. El término ecología es debido a Haeckel (Gener. Morphologie, I. 1886)