La acumulación de líquido en los pulmones a gran altitud (EPA); se produce con mayor frecuencia en el montañero que asciende rápidamente a altura por encima de los 2.700 m. El líquido dificulta la ventilación y provoca respiración entrecortada y fatiga. El trasporte de oxígeno al cerebro empeora, lo cual provoca confusión mental y pérdida del conocimiento; la afección es potencialmente mortal y su causa precisa es desconocida. Se trata administrando oxígeno suplementario y trasladando el paciente a una altitud inferior (ver también bolsa de Gamow).