Barra, varilla o pieza similar que atraviesa un cuerpo giratorio y le sirve de sostén en el movimiento.
En física, la línea alrededor de la cual gira o se supone que gira un cuerpo dotado de un movimiento, real o aparente, de rotación (eje de rotación). En ingeniería mecánica, dícese de la pieza que sirve para sostener y guiar un elemento giratorio de una máquina. Dícese de la barra horizontal que, dispuesta perpendicularmente a la línea de tracción, une dos ruedas opuestas de un carruaje. En matemática, dícese de la recta alrededor de la cual se supone que gira una línea para engendrar una superficie, o una superficie para engendrar un sólido.
En geometría, dícese de la recta fija alrededor de la cual se considera que gira un punto para engendrar una línea, una línea para engendrar una superficie o una superficie para engendrar un sólido; dícese del diámetro principal de una curva.
En an anatomía, la línea real o línea imaginaria que pasa por el centro de un cuerpo, un órgano o cualquier estructura con entidad; se aplica a la línea que pasa a través del centro del cuerpo, o de un parte del cuerpo, como el eje frontal, el eje biauricular o el eje basifacial.
En botánica, término usual, como sinónimo de cormo (vástago + raíz), de vástago o de tallo; en todos estos casos el eje es algo real y tangible. Mas, con frecuencia, también se emplea este vocablo en concepto de eje de simetría o simplemente de eje, como línea ideal de un órgano o de un complejo orgánico en torno a la cual se dispone con cierto orden sus partes integrantes. Las plantas que se ramifican poseen un eje principal y ramificación del mismo, las cuales, en relación con otras ramificaciones u otros órganos, constituye el eje secundario; de éstos pueden originarse otros, terciario, y así sucesivamente; el último ramito de una planta muy ramificada será un eje de enésimo orden; en este caso si el ramito trae flores será el eje de una inflorescencia. De la axila de la bráctea madre brotará una flor cuyos verticilos se dispondrán con cierto orden alrededor del eje de última categoría, el eje floral (F. Q.). Dícese de la línea tomada como referencia para la descripción del frústulo de un bacilariófito; siempre se distingue un eje pervalvar que une los puntos medios de las dos valvas. Las líneas que, en número infinito, lo cruzan perpendicularmente en su punto medio, son los ejes transversales. En las diatomeas pennales dos de ellos adquieren mayor importancia, y son los especialmente llamados apical y transapical, perpendicular entre sí y correspondientes a lo largo y a lo ancho de la célula, respectivamente; los ejes paralelos a los anteriores se designan con los mismos nombres precedidos del prefijo para- (por ejemplo, eje paraapical).