La enfermedad febril esporádica benigna a causa del virus del oeste del Nilo, se transmite por mosquitos Culex, con una incidencia predominante en la época estival (valle en la orilla oeste del Nilo y región al norte de Uganda donde fue observada la enfermedad por primera vez en 1937); la infección no suele evolucionar a encefalitis, puede ser de comienzo súbito y presenta síntomas como somnolencia, intensas cefaleas frontales, lesiones maculopapulosas, dolor abdominal, pérdida de apetito, náuseas y adenopatías generalizadas. Los cuidados son de soporte; muchos pacientes se recuperan con rapidez, pero pueden sufrir un malestar prolongado.