Se aplica a los productos químicos que estimulan la salivación, aumentan la presión sobre el esfínter esofágico inferior (EEI) y mejoran el vaciamiento esofágico en posición supina, pero no en posición erecta. La metoclopramida es un fármaco de esta categoría que tiene unos efectos secundarios por los que su uso no es aconsejable y su eficacia es cuestionable en comparación con los inhibidores de la bomba de protones, cuyo uso está muy extendido en la actualidad.