El proceso de enseñar a un niño a controlar las funciones vesicales e intestinales. La formación suele iniciarse entre los 18 y los 24 meses de edad, cuando la mayoría de los niños alcanzan el control voluntario de los esfínteres anal y uretral. El control nocturno de la vejiga puede estar ausente hasta que el niño tenga 4 o 5 años o más.