El suero de la sangre que contiene anticuerpos que se unen con las células T humanas. La globulina antilinfocítica se administra al paciente antes de un trasplante de células madre para destruir las células T y disminuir el riesgo de la enfermedad de injerto contra huésped (EICH). También se usa para tratar la EICH y, después de un trasplante de riñón, para ayudar a impedir que el cuerpo rechace el riñón: también se llama globulina antitimocítica.