Los trabajos de Castle le condujeron a afirmar la existencia de tres tipos de herencia; la mendeliana, la mezclada típica y la mezclada parcial. La mezclada típica sería aquella en la que los factores de caracteres alelomorfos se mezclan en el heterozigoto para formar factores determinantes de caracteres intermedios. Los factores del híbrido serían tan autónomos como los de cada uno de los padres, lo que supondría que realmente no se trata de un híbrido, puesto que podría reproducirse continuamente. Se trata de casos muy raros, y aun se discute si se ha dado alguna vez; se supone que en realidad no hay este tipo de herencia. La mezclada parcial sería aquella en la que los factores de caracteres alelomorfos se segregan en la gametogénesis del híbrido, pero con modificaciones dependientes de los varios grados de mezcla entre los dos factores alelomorfos. Los fenómenos observados por Castle se explican en vez de por un tipo de herencia mezclada, total o parcialmente, mediante los conceptos de polimería y de alelomorfismo múltiple. En realidad, la herencia mezclada no existe para los caracteres dependientes de genes localizados en los cromosomas, pero no es imposible para el caso de caracteres localizados en el citoplasma.