La hipersensibilidad humoral inmediata dependiente de IgE o de IgG. Se puede activar por muchos compuestos, incluidos fármacos, sobre todo penicilina y otros antibióticos; por proteínas extrañas empleadas como tratamientos, como insulina, vacunas, extractos de alérgenos y relajantes musculares; venenos de insectos, sobre todo de abejas, avispas, abejorros y hormigas de fuego; y determinados alimentos, como mariscos, fresas, chocolate, huevos y frutos secos.