La incapacidad parcial o total de los riñones para excretar los productos de desecho, concentrar la orina y conservar los electrólitos; el trastorno puede se agudo o crónico. La insuficiencia renal aguda se caracteriza pro oliguria y por la rápida acumulación de productos del metabolismo nitrogenado en la sangre (azoemia). Aparece en las hemorragias, traumatismos, quemaduras, lesiones tóxicas del riñón, pielonefritis o glomerulonefritis agudas y en la obstrucción de las vías urinarias inferiores. La insuficiencia renal crónica se puede deber a muchas otras enfermedades. Entre los signos precoces se encuentran lentitud, fatiga y torpeza mental. Más adelante aparecen anuria, convulsiones, hemorragia GI, malnutrición y diversas neuropatías. La piel puede adquirir un tono amarillo o pardo. La insuficiencia cardíaca congestiva y la hipertensión son complicaciones frecuentes como consecuencia de la hipervolemia.