Una de las teorías sobre la evolución, propuesta por el biólogo francés Jean Baptiste de Lamarck en 189; sugirió que los cambios en el individuo se adquieren durante su período vital, por su uso o desuso, en dependencia de las necesidades para su propio desarrollo, y que esos cambios eran heredados por su descendencia. Doctrina que «atribuye al propio organismo la facultad de reacciones ante las influencias externas con modificaciones de su organización, alteraciones morfológica o estructural» que puede luego conservar por herencia. Esta teoría, denominada herencia de los caracteres adquiridos, fue desplazada por el darvinismo.