Dícese del daño físico sufrido por el pie. El pie es el punto donde se producen muchas lesiones agudas (por ejemplo, fractura, distensión muscular, esquince y luxación) y lesiones por uso excesivo (por ejemplo, tendinitis, bursitis y fractura por sobrecarga). La lesión por uso excesivo suele estar causada por una tensión repetida y forzada sobre los huesos pequeños y tejidos blandos que tienen que cargar con todo el peso del cuerpo al hacer deporte. Un buen calzado deportivo es esencial para proteger los pies (zapatilla de deporte). Muchas de las lesiones por uso excesivo en el pie se asocian con anomalía anatómica que exageran el efecto de la tensión repetida que se produce durante la práctica del deporte. La anomalía más corriente que afecta a la pierna son los pies planos, los pies con excesiva pronación (se meten hacia dentro al correr), la anteversión femoral (giro hacia dentro de los huesos del muslo), arco plantar alto, rodilla valga (patizambo) y rodilla vara (pierna arqueada).