La enfermedad maligna y progresiva que se caracteriza por la aparición de gran número de linfoblastos, distribuidos por la médula ósea, la sangre periférica, los ganglios linfáticos, el bazo, el hígado y otros órganos (LLA). El número de células sanguíneas normales está reducido. Más de tres cuartos de los casos se dan anualmente en EE.UU. afectan a niños, la mayoría de ellos se diagnostica entre los 2 y los 5 años de edad. La enfermedad es de aparición súbita y progresión rápida caracterizada por fiebre, palidez, anorexia, fatiga, anemia, hemorragias, dolores óseos, esplenomegalia e infecciones recurrentes.