Los malos tratos físicos, sexuales o emocionales practicados a un niño. Los padres con alto riesgo de ejercer malos tratos se caracterizan por presentar necesidades insatisfechas, dificultad para establecer relaciones interpersonales adecuadas, expectativas irreales acerca de niños y falta de experiencia educativa, junto con el hecho frecuente de haber padecido negligencia o malos tratos en su infancia.