Se aplica, en EE.UU., a la persona preparada de forma académica y clínica para ejercer la medicina bajo la supervisión de un licenciado en medicina u osteopatía. Dentro de la relación que existe entre el médico ayudante y el médico, el médico ayudante tiene autonomía para tomar decisiones médicas y proporcionar una amplia gama de servicios de diagnóstico y terapéuticos.