Es un trastorno que se caracteriza por una forma discoide y no semilunar de los meniscos cartilaginosos de la rodilla. Es una anomalía en el desarrollo asintomática en lactantes y niños pequeños; manifestado más a menudo entre los 6 y 8 años de edad. Sus síntomas más frecuentes son la producción de un clic en la articulación de la rodilla o la sensación de que la rodilla cede. Estas características son asociadas con frecuencia a lesiones de la rodilla, aunque también se pueden presentar sin historia previa de traumatismo.