Se aplica al conjunto de procesos que intervienen en la entrada de hierro en el cuerpo, su absorción, transporte, almacenamiento, utilización en la formación de la hemoglobina y otros compuestos de hierro y su eventual excreción. Se absorbe a través de la mucosa intestinal, en este paso se oxida de forma ferrosa a férrica, una vez en la sangre el hierro circula entre el plasma y los sistemas reticuloendotelial o eritropoyético. Para sintetizar hemoglobina el hierro plasmático pasa al normoblasto, donde permanece hasta 4 meses atrapado en las moléculas de hemoglobina de un eritrocito maduro; los eritrocitos maduros posteriormente se deterioran y se destruyen. El hierro se libera de la hemoglobina en el sistema reticuloendotelial para volver a formar parte del depósito de hierro circulante para ser reciclado.