Que ha de morir o está sujeto a la muerte; que causa o puede causar la muerte. En biología, se aplica al ser vivo que ha de morir. En medicina, se aplica a la característica que se considera propia de un muerto o parecido a un muerto. En psicología, se aplica al sentimiento que hace desear de forma real o figurada la muerte de una persona. En teología, se aplica al pecado que se opone gravemente a la ley o la norma y no es fácil de perdonar.