La uveítis anterior aguda, es decir, una inflamación de la úvea, la parte del ojo que incluye sobretodo al iris (la parte coloreada del ojo que sirve como regulador de la cantidad de la luz), la pupila y también el cuerpo ciliar. Esta inflamación aparece generalmente algún tiempo después un traumatismo en uno o los dos ojos y puede afectar al ojo que no ha recibido el traumatismo. Esta reacción del otro ojo sería debida a una reacción retrasada de origen auto-inmune, es decir, por la agresión de las células del organismo por sus propios anticuerpos. Aparte de los traumatismos pueden haber otras causas, particularmente una intervención quirúrgica en el ojo.