Dícese del magullamiento del ojo que produce una decoloración (hematoma periorbitario). El área que rodea el ojo cuenta con abundante riego sanguíneo, por lo que el golpe en el ojo o en la estructura circundante tal vez provoque una hemorragia interna. No suele ser grave y se cura espontáneamente en unos pocos días, aunque se requiere una cuidadosa exploración porque podría relacionarse con una lesión más grave, como una fractura del hueso malar.