El trastorno neurológico progresivo poco frecuente que se presenta en la infección primaria por el virus del sarampión en niños menores de 2 años; tiene un período de latencia de 2 a 10 años. Se caracteriza por la inflamación difusa del tejido encefálico, cambios de personalidad, mioclonos atáxicos, convulsiones, ceguera, demencia, fiebre y muerte. No se conoce ningún tratamiento eficaz, aunque ciertos fármacos antivirales pueden hacer que la progresión de la enfermedad sea más lenta. Una combinación de isoprinosina oral e interferón alfa inyectado en los ventrículos del cerebro parece ser la opción terapéutica más eficaz.