Es un parque nacional de Costa Rica, ubicado en la península de Osa; se extiende sobre una superficie de 41.788 ha entre el golfo Dulce y el océano Pacífico (en el suroeste de la provincia de Puntarenas). Se trata de un conjunto de llanuras fluviomarinas costeras y esteros (zonas pantanosas), salpicados de pequeñas lagunas como la de Corcovado que posee un gran valor ecológico, manglares, ciénagas, costas arenosas, cerros y pequeñas mesetas que se elevan hasta los 745 m de altitud en cerro Rincón (resultado todo ello de la meteorización de rocas volcánicas y sedimentarias muy antiguas).
El Parque nacional de Corcovado posee parajes de gran belleza y una gran riqueza ecológica y paisajística, consecuencia de un clima húmedo y cálido, sobre todo en la costa, que se suaviza y se hace más fresco en las zonas más elevadas. Las temperaturas anuales oscilan entre los 25 y los 35 ºC de promedio, con unas precipitaciones anuales que fluctúan entre los 5.000 y los 7.000 mm. Estas fuertes y constantes precipitaciones dan lugar a una gran cantidad de cursos de agua (como los ríos Sirena, Llorona, Molina, Madrigal) y zonas lacustres, favoreciendo el desarrollo de bosques con árboles de gran altura (el nazareno, el ajo, el plomo, la ceiba y el pilón), en alternancia casi total con otros como el guayabón, el espavel y el cedro macho, todos ellos recubiertos de plantas epífitas. Se desarrolla de esta manera un hábitat ideal para el desarrollo y mantenimiento de más de 350 especies de aves (loros, pelícanos pardos, ibis, lechuzas, garzas, garcetas azules, pijijes, chorlitos, lapas), 150 especies de mamíferos, más de 100 de reptiles (como el cocodrilo) y anfibios (entre los que destacan la ranita de vidrio y el sapo venenoso), y unas 5.500 especies de mosquitos. El parque se administra desde el pueblo de Puerto Jiménez, localizado en golfo Dulce.