Es un parque nacional brasileño, creado en 1939 con el objetivo de preservar la vegetación atlántica situada en un área de vertientes muy escarpadas, que registra elevadas precipitaciones pluviométricas. Se localiza a 80 km de la ciudad de Río de Janeiro y se extiende por tres municipios del estado de Río de Janeiro: Magé, Petrópolis y Teresópolis, ocupando un espacio montañoso, caracterizado por abruptas quebradas y valles encajados de fuertes pendientes, por lo que los ríos fluyen con fuerza y existe el peligro de corrimientos de tierra, limitado por el papel protector de la vegetación en este suelo inestable. Debido a estas características, sus espacios abiertos al público están restringidos y permanentemente vigilados.