La primavera es la estación del año que sucede al invierno y precede al verano. En el hemisferio norte o boreal se extiende desde el equinoccio de primavera (día y noche de igual duración), el 20 o 21 de marzo, hasta el solsticio de verano (el día más largo del año), el 21 o 22 de junio. En el hemisferio sur o austral, se inicia el 22 o 23 de septiembre y concluye el 22 o 23 de diciembre (véase eclíptica).
La primavera se caracteriza por un aumento gradual de las temperaturas y de las horas de luz. Esas características sólo se aprecian en zonas de latitud media o alta. En las regiones ecuatoriales no puede hablarse de primavera, ya que por lo general sólo existen dos estaciones, una seca y otra húmeda, cada una con seis meses, y el día y la noche tienen prácticamente la misma duración (12 horas) a lo largo del año. En las zonas árticas y antárticas es una estación muy breve.
En el hemisferio norte se corresponde con los meses de marzo, abril y mayo; en el hemisferio sur, con los meses de septiembre, octubre y noviembre. La primavera dura 92 días en el hemisferio boreal, por sólo 89 en el hemisferio austral.