El conocimiento anticipado de alguna cosa en el epicureísmo y estoicismo. En retórica, la figura que consiste en proponer uno mismo la objeción que otro pudiera hacerle para refutarla de antemano anticipándose: anticipación. En botánica, el desarrollo anticipado de un órgano cualquiera. La prolepsis puede ser natural, espontánea, o bien ocasionada artificiosamente por el hombre, como en la producción de flores a destiempo, en la práctica de forzar la florescencia. Causas externas, independientes de la intervención del hombre, pueden también determinar la floración autumnal de plantas vernales. Cuando se trata de la foliación, brotadura anticipada, como consecuencia de condiciones anómalas de crecimiento. La brotadura proléptica, que ha de ocurrir sobre ramas no desprovistas de hojas, se produce a partir de yemas completamente constituidas y previo cierto período de reposo de las mismas, aunque es independiente de las épocas del año: esto es el sentir de H. L. Spät, en su trabajo, Der Johannistrieb, Berlín 1912.
Se dice también de los brotes (y de la brotadura) que naciendo en la axila de una hoja rudimentaria o metamorfoseada, con el carácter de braquiblastos, son los únicos que traen nomofilos, como acontece en toda casta de pinos y en el género Berberis. En este caso, el desarrollo y crecimiento de la planta son normales. Los braquiblastos nacen en la axila de las hojas de los macroblastos, en lugar de yemas foliíferas que se abrirían normalmente un año después; en cierto modo, por tanto, la brotadura también se anticipa aquí, pero no de manera anormal, sino en comparación con lo que sucede en otros géneros de plantas: este es el sentir de W. Troll, en el Handw. d. Naturwiss., 2ª ed., t. IX.