Se aplica a cualquiera de las distintas pruebas en las que se utilizan técnicas de biología molecular para detectar e identificar microorganismos, incluyendo virus, basándose en sus ácidos nucleicos. Incluyen las pruebas de confirmación de cultivos, con las que se identifican los microorganismos que crecen en un cultivo, y las pruebas directas, que permiten identificar los microorganismos directamente en una muestra.