Dícese de la prueba clínica para evaluar la inestabilidad de un hombro doloroso. El hombro problemático del paciente en decúbito supino o en posición sedente se mueve pasivamente en abducción y gira para luego someterse a tensión mientras el médico estudia la cara del paciente pos si hay signo de aprensión, y explora el músculo del hombro por si aprecia espasmo. Se manipula el hombro normal de la misma forma y se compara los dos lados para detectar pérdida de movimiento pasivo. La prueba se necesita realizar con cuidado por un experto por el peligro de provocar una luxación anterior en un hombro muy inestable.