Prueba de condición física creada en la Universidad de Harvard durante la II Guerra Mundial. Consiste en subir y bajar de un banco de 50,8 cm de altura, treinta veces por minuto con un ritmo regular y durante 5 minutos o hasta el agotamiento. Se toma el pulso en reposo antes de la prueba, luego transcurrido un minuto, dos y tres minutos después de la prueba. El nivel de condición física se calcula a partir del índice con el cual es pulso vuelve al nivel en reposo; la prueba ya no se emplea en medicina porque no es muy fiable.