La prueba sanguínea que se utiliza para diagnosticar el déficit de plasminógeno en el paciente que presenta múltiples episodios de tromboembolia. Las concentraciones anómalas de plasminógeno también son características de coagulación intravascular diseminada, fibrinólisis primaria, cirrosis hepática y otras enfermedades graves del hígado, embarazo, eclampsia y algunos trastornos inflamatorios.