El procedimiento exploratorio para detectar la presencia de enfermedad o trastorno. En el deporte, el reconocimiento médico suele practicarse con el fin de determinar la capacidad del deportista para realizar un ejercicio agotador. Normalmente, su objetivo primario es hallar anomalías que puedan suponer un riesgo de muerte repentina o lesión, o detectar cualquier afección que pueda agravarse seriamente con el ejercicio. Los reconocimientos rutinarios a deportistas no son habituales en el Reino Unido (excepto en el caso del boxeo), si bien en Estados Unidos hay una demanda cada vez mayor de certificados médicos para muchos deportes y actividades de ocio. Toda persona con más de 35 años que quiera participar en actividades vigorosas debería someterse a un reconocimiento médico general con el fin de identificar riesgos potenciales. La mayoría de las muertes en el deporte se asocian con personas que presentan riesgos identificables que no se han corregido.